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Una niña logró que le dejaran usar también el apellido de su madre

Una chica de 11 años, cuyos padres están separados, logró que la Justicia la autorizara a agregar a su apellido paterno el de su madre, al entender que de este modo se protegen los Derechos del Niño y que la modificación no afecta los principios de orden y seguridad en los que se basa el principio de inmutabilidad de los nombres.

El fallo dictado por la Sala E de la Cámara de Apelaciones en lo Civil, compuesta por Mario Calatayud, Juan Carlos Dupuis y Fernando Racimo, confirmó una sentencia de primera instancia contra la apelación del fiscal de Cámara, que se había opuesto al deseo de la chica de agregar el apellido de su madre. La presentación judicial fue efectuada por ambos padres, de común acuerdo. La fiscalía se había opuesto a la añadidura del segundo apellido, porque argumentaba que podían “verse afectados aquellos principios de orden y seguridad en que se asienta la inmutabilidad”. Pero los camaristas entendieron que “si bien uno de los principales caracteres del nombre de las personas es su inmutabilidad, dicho principio no es absoluto, pues se admiten casos en los cuales puede ser soslayado, en especial cuando en manera alguna resultan afectados los principios de orden y seguridad que tiende a afirmar o existen razones que inciden en menoscabo de quien lo lleva”, según el fallo fechado en marzo de este año, pero dado a conocer ayer (22/7). Proyecto. El proyecto del Poder Ejecutivo para modificar el Código Civil y convertir en obligatorio el registro de las personas con los apellidos paterno y materno fue remitido al Senado hace más de dos años y desde entonces siempre ha quedado supeditado al interés mayor del Poder Ejecutivo en otros proyectos, razón por la cual nunca pudo superar el trámite en la Comisión de Legislación General.

Fuente: Reseña Niñez y Adolescencia en los Medios, Periodismo Social